La pasada semana, el presidente de la Junta de Galicia presentó ante el sector la Estrategia de Impulso a la Biomasa 2014-2020, para convertirla en una industria puntera y situar a Galicia como referente estatal.
El presidente de la Junta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo destacó que la Estrategia de Impulso a la Biomasa 2014-2020 preve una movilización de 450 millones de euros en inversiones hasta el año 2020, ayudas directas que superan los 89 millones de euros y la generación de 1.000 puestos de trabajo.
Durante el acto de presentación de la iniciativa ante el sector y los agentes implicados, el mandatario gallego explicó que este proyecto nace con el objetivo de potenciar una nueva industria al servicio de la recuperación económica de nuestra Comunidad, creando una auténtica industria de la biomasa en Galicia, una actividad empresarial puntera que nos permita ser líderes y referentes en esta materia a nivel estatal.
«Tenemos ante nosotros una oportunidad económica que permite el aprovechamiento de todo el potencial que ofrecen nuestros montes», asegura, destacando la apuesta por una industria que abarca toda la cadena de valor del producto, que permite fijar empleo en el sector rural y que está en consonancia con los objetivos de la RIS3 (Research and Innovation Smart Specialisation Strategy – Estrategia de Especialización Inteligente en Investigación e Innovación), que Galicia presentó en Europa.
En su intervención, el jefe del Ejecutivo autonómico recordó que la Comunidad gallega dispone de unas características naturales privilegiadas, cuenta con abundante materia prima y con una elevada masa forestal (el 50% de toda España), que representan «claras ventajas que Junta y sector estamos dispuestos a aprovechar». Unas capacidades que «redundarán en el despegue de la biomasa como fuente de energía de presente, pero sobre todo, de futuro, al tiempo que fortalecerán nuestra industria maderera».
«Tenemos ante nosotros la oportunidad de una energía limpia», añadió, una energía capaz de reducir la dependencia energética de Galicia de los derivados del petróleo; de mejorar la gestión y el rendimiento de los montes gallegos, contribuyendo a la prevención de incendios forestales; de impulsar el ahorro y la eficiencia energética en familias, empresas y organismos oficiales en hasta 70 millones de euros al año; y de proteger el medio natural, con la consiguiente reducción de emisiones de CO2. Así, con una valorización de 275.000 toneladas por año de biomasa que se prevé conseguir con esta estrategia se evitaría la emisión a la atmósfera de 246.000 toneladas de CO2 anualmente.
En este contexto, el consejero de Economía e Industria, Francisco Conde, señaló la importancia de una Estrategia que permitirá desarrollar una industria para la que Galicia cuenta ya con una base sólida. Tenemos, «los recursos y la experiencia suficiente para asegurar la calidad e intensidad del suministro. Y tenemos el potencial necesario para garantizar la sostenibilidad del recurso».
Conde destacó la oportunidad de, con la participación de todos los agentes implicados, «desarrollar una verdadera industria ligada a la valorización energética de nuestros bosques», que permita poner en valor el monte gallego favoreciendo una gestión que facilite su desarrollo económico, creando y fijando empleo rural, y profesionalizando la gestión forestal.
Incremento de la demanda y apuesta por la innovación.
El presidente de la Junta explicó que la Estrategia Integral de Impulso a la Biomasa, «completa y a largo plazo», marca cuatro ejes para «alcanzar el futuro al que queremos llegar y, con realismo, al que podemos aspirar», dijo. Respeto al primero de ellos, Feijóo señaló que «es realista» pensar que existe un amplio margen para incrementar la demanda de biomasa y también «voluntad de la Administración» para que así sea. A este respeto señaló que la estrategia fomentará que ayuntamientos, industria agroalimentaria y particulares consuman este tipo de combustible, comenzando por la propia Administración gallega, con la instalación de una red de energía térmica basada en biomasa en el complejo de San Caetano. «Pero también es realista aspirar a una mayor demanda de biomasa porque los datos demuestran que las gallegas y los gallegos están dispuestos a confiar en esta industria en relevo de los combustibles fósiles», añadió el presidente de la Junta, indicando que así se puso de manifiesto tras la publicación de la orden anual de ayudas para la instalación de calderas, con más de 9 millones de euros, que se agotó en menos de 24 horas.
Feijóo remarcó que, si este primer eje «está en disposición de cumplirse», es necesario trabajar en los otros tres, empezando por el avance de la oferta y de las capacidades del sector a través de la innovación tecnológica, algo que, aseguró, «queremos hacer conjuntamente», tanto con la colaboración e implicación de los emprendedores «dispuestos a abrirse a las nuevas ideas y tendencias»; como con la colaboración del CIS Madeira (Centro de Innovación e Servizos Tecnolóxicos da Madeira de Galicia) para propiciar nuevos proyectos industriales; y con el compromiso de la Administración (a través de las Consejerías de Economía e Industria y de en medio Rural y del Mar) para «darle absoluta prioridad a todos aquellos proyectos que introduzcan la biomasa cómo actividad preferente».
El sello de calidad Galicia.
«Desde la Junta de Galicia no quisimos limitar al ámbito técnico y financiero nuestro apoyo a la biomasa. Pensamos que existe también un tercero eje fundamental para poner en valor este sector, que es el referido al origen y a la calidad gallega», dijo Feijóo, destacando que a cuyo objeto se decidió incorporar a la estrategia una decisión «de las más importantes»: la de «acercar valor añadido» a los emprendedores que fortalezcan el sector «con materia prima de Galicia, creatividad de Galicia y dirección desde Galicia». Así, las empresas del sector podrán amparar sus productos bajo lo sello Galicia Calidade para poder reconocer las condiciones relativas al origen, calidad, producción y sostenibilidad. «Es decir –subrayó-, que también la biomasa pueda contar con una certificación que garantice su origen 100% gallega.
Como cuarto pilar de la estrategia está la formación y la divulgación, «el propósito de convocarnos continuamente para seguir avanzando y mejorando día a día», señaló Feijóo, objetivo en el que será esencial el papel del Foro de la Biomasa que se creará con los agentes económicos, administrativos y sociales del sector.
Importancia del sector de la biomasa en la recuperación económica.
En su intervención, el presidente gallego situó la Estrategia Integral de Impulso a la Biomasa como una «herramienta» que contribuirá a recuperar «los niveles de progreso que teníamos antes de la crisis». «Habrá quien se pregunte si merece la pena esta apuesta por un sector aún por desarrollar en Galicia, e incluso desconocido en muchos campos de nuestra sociedad. La respuesta es que sí», aseguro, argumentando que limitar la estrategia económica a los sectores históricos «sería insuficiente». «Tal cosa sólo nos permitiría, en el mejor de los casos –dijo- volver a la economía del pasado que se ha demostrado vulnerable ante las dificultades».
A cuyo objeto abogó por encontrar «nuevas herramientas» para que la recuperación «sea una ola a la que subirse lo antes posible y con la que trazar la economía del futuro», herramientas entre las que, dijo, se encuentra la biomasa. «El sector de la biomasa es una prueba palpable de que tenemos potencial propio que aprovechar, capacidades propias por desarrollar y voluntad para hacerlo», aseguró.
«Tenemos ante nudos una oportunidad gallega», por cuanto permitirá cerrar toda la cadena de valor, «una energía de los gallegos, generada por los gallegos y destinada a los gallegos», concluyó.
fuente: INEGA